Cómo Criar Hormigas Pheidole pallidula

Introducción

La podemos encontrar por todo el Mediterráneo y es una inquilina habitual de muchas cocinas y baños de nuestros hogares.

Esta pequeña hormiga puede reportar grandes satisfacciones a todo aquel que se decida por su cría, pero también pueden resultar un pequeño quebradero de cabeza si no se tienen en cuenta unas sencillas recomendaciones/precauciones.

Por un lado, su pequeñísimo tamaño las convierten en las Harry Houdini de las especies peninsulares: son expertas en encontrar cualquier mínima rendija por la que escapar y, al ser una hormiga resistente, prolífica y que se adapta muy bien al entorno urbano, nos podemos encontrar con una bonita colonia viviendo en nuestra propia cocina. De todos modos, con asegurarnos que nuestro hormiguero tiene cualquier orificio o junta bien sellada será más que suficiente para criarlas con total tranquilidad de que no se van a escapar.
Por otra parte, son una especie muy sensible a los cambios de humedad, por lo que siempre es recomendable que estén en un entorno de humedad al 65%-90%.

No obstante, sus ventajas superan con creces estas pequeñas contras y así, son una hormiga muy activa, de desarrollo muy rápido (pudiendo llegar al millar de individuos en el primer año) y que proporciona ratos muy interesantes durante su observación.

Se trata de una hormiga omnívora que acepta de buen grado líquidos dulces, semillas, frutas y, sobre todo, insectos, a los que no dudarán en dar caza y matar si es necesario (recordemos de todos modos que siempre es preferible congelar cualquier insecto durante 24h para evitar introducir ácaros en nuestro hormiguero). Al ser omnívora su alimentación es bastante sencilla, pero es muy recomendable suministrarles un aporte continuo de proteína en forma de insectos, así que ten esto muy en cuenta si te decides a criar esta especie y no eres muy dado a estar cazando moscas por casa o tener botes con gusanos en la nevera

Un comportamiento muy interesante de observar es su reclutamiento. Cuando una exploradora localice una fuente de alimento se dirigirá al hormiguero y empezará a ‘bailar’ dejando un rastro de feromonas para indicar a más hormigas que hay que ponerse manos a la obra para recoger la comida. En poco tiempo se puede observar cómo un buen número de hormigas estarán ya transportando o despedazando la comida.

Es una especie monogínica aunque se han recogido casos de poliginia en la naturaleza. En cautividad, lo normal es que si ponemos juntas varias reinas se maten entre ellas al nacer las primeras nurses.

Recomendaciones para su cría:

• Aunque se adaptan a todo tipo de hormigueros, son preferibles aquellos que permitan llevan un buen control de humedad. Un acrílico con seta puede ser buena opción…aunque no la única.
• Dado su pequeño tamaño, una buena lupa (40x por ejemplo) nos ayudará a disfrutarlas en las mejores condiciones.
• Asegurarse de que el hormiguero tiene bien selladas todas las juntas y que no queden rendijas por la tapa de la caja de forrajeo que usemos.
• Son hormigas muy voraces y si tienen una fuente continua de proteínas pueden crecer en número de manera exponencial. En caso de no querer que el número se nos dispare, una manera de limitar su crecimiento es racionándoles el alimento rico en proteína.
• Evitar darles alimento que pueda pudrirse. Se trata de hormigas que no son especialmente cuidadosas con el mantenimiento del hormiguero y son dadas a acumular restos y desperdicios dentro del hormiguero. En caso de darles alimentos como frutas, jamón, carne o similares, tendremos que hacerlo en cantidades muy, muy pequeñas o muy grandes (para que no puedan meterlas dentro del hormiguero, sino que tengan que trocearlas) y así evitar que puedan aparecer hongos o moho dentro de nuestro hormiguero.
• Aunque son hormigas tranquilas, la reina es asustadiza ante vibraciones así que es recomendable tenerlas en sitios protegidas de vibraciones y movimientos

Parte de esta información ha sido cedida por criarhormigas.es.